miércoles, 10 de marzo de 2010

Aciertos y desaciertos

¿Cómo podemos identificar cuáles de nuestra acciones son aciertos y otras desaciertos? Hoy no estoy aquí para hablarles de poesía, recitar versos poéticos ni elevar almas para que vean lo ciego a los ojos humanos, no. Hoy vengo tan sólo a hablar de aquello que parece convenir o no.
Todo depende, en mi opinión, a las circunstancias. Algo que parece beneficiarnos en cierto momento, al momento siguiente parece de lo peor. Hablo de la vida, hablo de la muerte. La muerte, que nos parece una dulce solución en un momento de recaídas, al siguiente (y a gran mayoría de ojos externos) es impensable, totalmente rehuíble. No se puede exponer la vida propia al peligro de la muerte. ¿Y cómo estamos constantemente exponiendo la muerte al peligro de la vida? Las cosas cambian desde esa perspectiva. Es lo mismo, y al mismo tiempo no lo es. ¿En qué circunstancia puede ser la decisión de la vida un desacierto en relación a la muerte? Es una cuestión para pensar de forma importante. O quizás parece buscado, recraneado y demases cosas.
Ahora, una cuestión técnica que creo que debe ser tocada. ¿A qué se llama "acierto"? ¿Y a qué "desacierto"? "Acertar: ¿haber escogido la mejor opción? ¿Y qué es lo mejor? ¿Aquello que nos beneficia? ¿Aquello que es de buena calidad? ¿Lo mejor es lo bueno? Hagamos un juego y rebatamos: diccionarios dicen que acierto es "hallar el medio apropiado para el logro de algo" ¿Y qué es lo apropiado? Lobuscas y no lo encuentras. ¿Será lo conveniente? ¿Lo "mejor", "bueno"? ¿Y qué vienen a ser estas palabras?
En fin, el punto es... ¿Cómo poder saber qué es lo que nos conviene y lo que no? ¿Quién puede juzgar más que uno mismo las condiciones de un acto como "apropiadas, convenientes"? A veces las cosas apropiadas no nos gustan, aunque deberían convenirnos. ¿Es un acierto siempre bueno?
Dejemos la condición de "acierto" como el mero medio para ese algo. Como la condición de ese medio en su resultado, es decir, de la calidad-resultado-respuesta del medio como puente para un algo que deseamos. Obviamente bajo esta condición, un acierto puede ser para un beneficio o un daño, propio o externo. Porque pensamos en la palabra en sí, neutral, sin una orientación en su esencia pura. Pensamos en "acierto" en su estado primitivo. "Hallar el medio apropiado para el logro de algo" apropiado como indicado, correcto. Como la "mejor respuesta". Como el mapa de mayor calidad que nos conduce de forma precisa al sitio que deseamos.
El desacierto, por el contrario, sería una respuesta equivocada para la obtención de algo. Y en la "esencia propia, neutra de la palabra", no vendría a tener un calificativa negativo, ¿no? Pero hay ciertos puntos que nos hacen tomar de manera inmediata estas palabars como negativas o positivas. Y aquí vuelvo al principio.
Dije "todo depende, en mi opinión, de las circunstancias" y todo en la vida es así. Hasta el uso de las palabras. Lo más probable es que lo anterior haya parecido una charla sin sentido, porque es en el fondo eso. Pero desde otra óptica no podría serlo. Y me ha llevado hasta acá. A decir mis últimas palabras. Desde un extremo las cosas parecen buenas. Desde otro malas. Las palabras pueden ser tomadas de cualquier forma, porque cada quien les da su propio valor. ¿Ha sido un acierto mi discurso o un desacierto en abrirles los ojos? Yo soy nadie para darles lecciones de vida pero mi calidad de nadie me otorga todo el poder del mundo para decir lo que quiera. Total que quien elige escuchar ha sido libre de hacerlo. Toma de mis palabras un valor que yo no les trasmito neutro.
Que este acertijo, a quien lo devele, le dé que pensar.

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